14.10.16

¿Qué es el solipsismo?

     Recordemos primero el sistema por el cual de acuerdo a la ciencia oficial, percibimos todo nuestro entorno durante toda nuestra vida. Cuando usted ve, huele, escucha o toca algo; los neuroreceptores recogen esos estímulos que van desde un cambio en la presión hasta el reflejo de la luz y mediante un proceso metabólico son conducidos a través de una fibra nerviosa hasta el sistema nervioso central. Es en este lugar en nuestro cerebro que se dan las conexiones neuronales necesarias que nos permiten interactuar con el medio que nos rodea. Son estas conexiones las que se dan para saber que nos han golpeado, nos han cegado con una luz muy fuerte o para sentir el beso que nos han dado. A partir de este punto final en estas conexiones es que se concibe el concepto de solipsismo. Antes de continuar y explicarle de una vez por todas qué es, permitame ponerle en contexto un poco de como me volví hacia esta corriente filosófica.

     Desde hace unos 15 años, siempre tuve una duda que nunca me dejaba en paz ¿cuál es el sentido de la vida? No me malinterprete, no hablo de tendencias suicidas; sino como una curiosidad sana, siempre quise saber qué es la vida, para qué la vivímos y más tarde esa duda sin resolver la transformé a ¿qué es la realidad? Actualmente, el solipsismo me llevó a empezar a aprender cuál es el concepto de realidad el cual dicho sea de paso es muy difícil de entender. A la edad de 11 o 12 años, recuerdo que hacía el ejercicio mental de imaginarme el universo sin una sola vida biológica en toda su infinidad, luego sin ningún tipo de cuerpo celeste, luego sin ningún tipo de energía o deidad. Al final de ese ejercicio siempre quedaba mareado porque llegaba a imaginarme La Nada. ¿Qué es La Nada? la falta de El Todo, pero ¿cómo puedo definir El Todo a partir de La Nada? Se lo planteo en términos más metafísicos: si no existiera Dios, ni el espíritu, ni el alma además de la falta de planetas y del mismo universo ¿qué hubiera? Esa pregunta me la hacía a los 11 años y me dejaba muy mareado y confundido. 

     Cuando tuve acceso a Internet, intenté encontrar la respuesta a estas dudas. En mis primeras aventuras para conocer qué es la realidad, descubrí que ni por cerca yo era la única persona que se había preguntado esto; lo que me pareció lo más natural del mundo. René Descartes, dedicó buena parte de su vida a intentar explicarse qué es la realidad. Él también era solipsista, ya que cuando dijo "Pienso, luego existo", practicamente con esas palabras definió todo lo que yo intento explicarle en este artículo. Fue hasta el año pasado que descubrí que mi forma de ver la realidad, tenía este nombre; es decir, yo ya conocía el solipsismo pero no sabía que eso era.

     Retomando el proceso metabólico del que le hablé al inicio de este artículo. Estamos en que las conexiones neuronales, en respuesta a estímulos nerviosos de nuestro ambiente son las que nos permiten darnos cuenta de todo; es decir sin estas conexiones neuronales, estaríamos en un estado catatónico. Recuerde "PIENSO, LUEGO EXISTO" ¿Qué tal si hacemos ingeniería inversa? ¿Qué tal si en lugar de que las conexiones neuronales sean la reacción, mejor sean una acción? Primero piense, luego exista. Primero realice esas conexiones neuronales, luego vea lo que ocurre en su ambiente. Si lo quiere interpretar a un nivel de ciencia ficción, imaginese un viaje hacia el futuro en microsegundos a nivel mental. Esto es el solipsismo, mis amigos.

     Por eso digo que Dios está en nuestra mente. Un religioso le ora con toda su "fe" a Dios para pedirle algo. Le planteo que lo que ha sucedido, es que esa "fe" le ha permitido hacer las conexiones neuronales correctas para que pase lo que le ha pedido a Dios. En mi vida, me he topado ante muchas situaciones en que si bien las opciones eran multiples, yo siempre me concentré en una sola y ante todo pronostico he conseguido lo que me planteé sin titubear desde el principio. Obviamente esto no siempre es así, porque para que de resultado hay que creer en ese resultado y si por ejemplo me quiero ganar la lotería, yo sé que el solipsismo nunca me concederá tal hazaña porque por más que me esfuerce yo sé que las probabilidades son pocas y eso no permitirá que se hagan las conexiones adecuadas. Pero por ejemplo, si usted quiere salir temprano del trabajo y para ello necesita que su jefe se retire pronto, pues tenga la completa certeza que si le ve a su jefe comiendo algo eso le hará daño y tendrá que irse temprano a su casa. Es así. Pienso, luego existo. 

     Pero ojo, el solipsismo no es solamente una herramienta con la que usted podrá anticiparse a una situación. Va más alla de eso y culmina bajo esta misma lógica en la explicación de qué es la realidad. Será un poco difícil explicarle, pero verá, a mí ni a usted no le consta la existencia de nadie más. Yo sé que existo, estoy 100% seguro de eso; y yo basado en conexiones neuronales me doy cuenta de que usted está ahí, a la par mía, detras de una computadora o a mil kilómetros de distancia; pero no hay manera de que me conste que usted existe. Y es lo mismo con usted hacia todas las personas incluyendome a mí. Todos estamos seguros de nuestra existencia pero nada más de eso. No tenemos la manera de constatar la existencia de los demás a no ser por las conexiones neuronales que nuestro cerebro nos indica que los demás están ahí. Y es apartir de este punto, que se complica más la cosa si no me consta que nadie más exista ¿por qué yo sí existo? es que acaso yo o usted en la misma situación somos especiales, partiendo que no hay nadie más y ser especial pasa a carecer de sentido. Pues la explicación es una Entidad Divina, la cual existe en algún lugar del universo y que posee una superinteligencia capaz de simular toda nuestra vida. Una entidad lejos de nuestro entendimiento. Ejecutando rutinas que en su conjunto llamamos "Realidad". Acá es donde la cosa se pone más escabrosa y así como a los 11 años me confundía imaginar La Nada, actualmente esa Entidad Divina es la manera concluyente a la que se llega para explicar el sentido de la vida.

Kyle Broflovski.

     Para ir cerrando, recuerdo como a los 15 años viendo un capítulo de South Park, Kyle en medio de las aventuras de sus amigos, él pasó todo el capítulo intentando explicarse a sí mismo qué es la realidad, Al final del capítulo logró entenderla, no la explicó, solo se vió que logró entenderla y alcanzó un nivel de conocimiento tal que evolucionó a nivel mental. Es quizá lo que los hindúes llamaban Nirvana, ya que la leyenda cuenta que Sidartha Gautama, una vez que terminó de meditar, alcanzó el Nirvana y dejó atras su vida terrenal.

10.10.16

Los tiempos de Dios no son perfectos

     Antes de empezar, hago la aclaración que este iba a ser un artículo lleno de insultos y lenguaje gracioso que se me da con facílidad, pero afortunadamente he comprendido que no es necesario que sea así. La mejor manera de exponer esta idea es de una manera formal y educada. Quizá algún día vuelva a escribir este mismo artículo como iba a ser en un principio. Para mientras acá les dejo: Los tiempos de Dios no son perfectos.

     Muchos amigos y conocidos evangélicos, usan muy a menudo esa frase. Dan a entender que lo que les tenga que ocurrir, ocurrirá en el momento adecuado porque así lo quiere Dios, porque tiene un plan específico para ellos. Antes de seguir, quiero enfatizar esto: los que repiten cansinamente esa fráse son evangélicos; no católicos los cuales también están familiarizados con esta. Continuando. Esta premisa se basa en la omnipotencia y supuesta misericordia de Dios, algo que a mi juicio no es tal así. Ustedes saben que soy solipsista. Para mí, Dios es nuestra mente y el universo como uno solo. Si Dios es misericordioso es porque nosotros debemos serlo si Dios es omnipotente es porque nuestra mente lo es. Pero volviendo y es acá cuando me cuesta no usar malas palabras porque tenía una especial reservada. Si Dios nos tiene arrastrados en la porquería, es porque él así lo quiere de acuerdo a ese criterio. Es porque algo necesita enseñarnos y hasta que lo aprendamos no saldremos de ahí. Si de arrastrarnos en esa porquería pasamos a ingerir esa porquería, es debido a que necesitamos aprender otra lección todavía "mejor". Y él nos librará de todo mal, hasta que algo hayamos aprendido, porque su tiempo es perfecto; aseguran los evangélicos. Por el contrario si vivimos en paz y abundancia de todo lo bueno, es por la misma razón. Lo que en este último caso es fácil de explicar ya que si nos basamos en su misericordia, es lógico que nos de todo eso. Sin embargo, ahí están aquellos otros también esperando que Dios se acuerde de sacarlos a tiempo de su sufrimiento.

     He sido testigo de como personas ante la calamidad y luego de las etápas de Kübbler-Ross, se quedan convenciendose que los tiempos de Dios son perfectos. Eso, la psicología lo explica muy bien ya que la última etápa es la aceptación. Es por ello, que la mayoría de personas mejor aceptan que Dios les tuvo que quitar a un ser querido, una casa o un empleo; porque él sabía lo que estaba haciendo y algo peor les iba a pasar, así que Dios prefirió matar primero a su ser querido antes que... alguien más lo hiciera. Digamos, Dios mandó a un asesino a pegarle trés balazos antes que viniera otro a pegarle 8 balazos. Esa es la lógica. Dios no le dió ese trabajo de ensueño porque sabía que el dinero lo corrompería.

     Amigos, vuestros tiempos son perfectos. Todo ocurrirá en la medida que ustedes quieran que ocurra. Todo lo malo les pasará en la medida que ustedes no sean precabidos. Todo lo bueno les llegará en la medida que ustedes luchen por ello. Dejen de pensar que Dios en su divinidad se molestará en averiguar sobre la vida de josesito, kevincito o yahairita y les deparará un destino hecho a su medida. Si quiere que Dios haga algo en su vida, muevase y empiece a hacerlo usted que su mente se encargará del resto.

9.10.16

Mmm no, ya nos habían contado eso antes

     Ya he escrito sobre esto hace años, pero me pareció importante volver a hacerlo. Estos últimos días hemos oído hablar sobre el peor huracán de la historia, sobre que ya encontraron la cura del SIDA, que ya encontraron agua en Marte, que se recibió por primera vez una señal del espacio exterior, que Corea del Norte esta vez va en serio. ¿Apocalíptico? ¿Sensacionalista? ¿La cruda realidad? No, no y no. ¿Acaso ya no lo recuerda? ¿Qué estaba haciendo usted hace 10 años? ¿Hace 7? ¿Hace 4? ¿El año pasado? ¡Todas esas noticias ya nos las dijeron en el pasado!

     En 2005 cuando iba a bachillerato recuerdo que dijeron que ya habían encontrado la cura del SIDA, en 2009 también y en 2013 también lo celebraron con bombos y platillos. Acá en El Salvador, cada vez que hay un temporal se considera que es el peor temporal de la historia, la presidencia sale a decir esto. Desde que era un niño escucho decir que la NASA ha descubierto agua en Marte y desde entonces también vengo escuchando sobre el grupo terrorista del momento o la nación beligerante de moda que pone en jaque la paz mundial y nunca ha habido alguien tan loco como ellos.

   En la novela 1984, del señor Welles; le da un nombre a este fenómeno que le he planteado: Doblepensar. Ahí, el IngSoc se encarga de alterar los hechos históricos para generar caos u orgullo entre las personas de esa utópica sociedad. Yo podría creer que el doblepensar es algo ficticio, pero este tipo de situaciones me llevan a pensar lo contrario. Un caso claro de esto ocurrió en 2001, cuando USA le declaró la guerra a Bin Laden e invadieron Afganistan. Para el año 2003, yo apenas tenía 13 años y le juro que hasta la fecha no recuerdo como fue que trasladaron de Afganistan a Iraq la bendita guerra. Quizá un niño de 13 años no entienda eso, pero de la noche a la mañana parecía que Iraq había sido el rival de toda la vida de USA, cuando apenas hace dos años estaban bombardeando poblados en Afganistan. Eso es doblepensar y me di cuenta de ello.

     Los mótivos verdaderos pueden ser variados. Por ejemplo, en mi caso aunque no del todo correcto y explicaré el porqué después, si me están diciendo cada trés años que ya encontraron la cura del SIDA y soy conciente de ello, llegará un momento cuando en verdad la encuentren que ya no me lo creeré. Similar a la fábula del partorcillo mentiroso (no trata sobre el hermano Toby). O el día que digan por enésima vez que recibimos ondas de una civilización alienígena, no me lo voy a creer y ya tendrémos a los alienígenas durmiendo en nuestro patio. Aclarando lo del SIDA, yo hace muchos años declaré que no creo en esa enfermedad. Sí, lo leyó bien. Y no me ponga esa cara de incredulidad, que así como usted no cree en el alunizaje del hombre en 1969, algo que es 100% real y solo los necios siguen creyendo que es falso, no se asombre cuando yo le digo que no creo en el SIDA. También tengo derecho a mis conspiraciones. No creo en el SIDA, en el Cancer, en el Calentamiento Global, en Jesucristo como mesías, en seres reptilóides y en alguna otra cosa que si me la pregunta con gusto se la responderé.

Bueno, finalizando. Recuerde que la próxima vez que escuche algo en la televisión y se lo planteen como una novedad, tenga la certeza de que eso no es así, que hace algunos años ya se lo dijeron pero como no ponemos atención a las cosas, ya se le olvidó. Lo invito: la próxima vez que escuche una noticia impactante en la tele, anotela en un lugar visible solo para usted y se dará cuenta que en cinco años le estarán volviendo a contar esa noticia como un gran descubrimiento. Se lo prometo.