Wenn ich einmal reich wär

     Como sabrán, al expresidente de la República, Francisco Flores, la fiscalía le ha abierto una investigación por unos cheques que cobró a su nombre en el período en que este fungía como mandatario de El Salvador. Dicha acusación surgió a partir de un reporte del Departamento del Tesoro, de Estados Unidos, en el que informaban a la fiscalía salvadoreña lo que acabo de exponer. La cantidad total de dinero que se reportó que cobró es de $10,000,000. Pero todo eso, usted ya lo sabía, no vive debajo de una roca, así pues quiero dar mi opinión respecto a este, llamémosle “enriquecimiento” ilícito, y pongo entre comillas lo de enriquecimiento, porque hay que tener claro que para enriquecerse, primero hay que ser pobre, cosa que Francisco Flores no lo era antes ni ahora.

     Para continuar, quisiera que alguien me dijera que no quiere ser rico, porque aún no he conocido una persona que no sueñe con incrementar su dinero y vivir una vida placentera con una buena fortuna, y es natural querer eso, es parte del instinto humano querer lo mejor para uno mismo y nuestra familia, como ejemplo me pongo yo porque de seguro muchos quisiéramos lo mismo: yo quisiera un Play Station 4, vivir en un país acorde a mis gustos, que mi familia no se matara trabajando por nada, vivir en una casa grande y tener un buen carro con lo último en tecnología y además tener llena la refrigerado del hogar. ¿Le pareció que algo de eso estuvo fuera de lugar? No verdad, es más, quizá fui hasta modesto porque en un país desarrollado esa descripción se adecua al modo de vida de una persona común y corriente, pero espero que haya comprendido lo que le quise decir.

     En los países como el mío es de lo más común encontrar zonas residenciales exclusivas para algunos pocos, y dichas zonas casi siempre tienen un gigantesco muro que intenta aislarlas de la que casi por regla general es una zona de casas marginales donde vive gente que apenas tiene para pasar el día a día. En casos así la exclusión de clases es lo primero que se me viene a la mente, ya que por más que algún partido político hable de la reconciliación histórica entre las clases sociales y el perdón y olvido de los hechos barbáricos del pasado, situaciones como las de esas zonas residenciales proponen lo contrario para el entendimiento del colectivo.

     En lo personal, desde hace tiempo siempre que he visto que un carro del año se estaciones en determinado lugar y que sus ocupantes se bajan con aires de semidioses terrestres, luciendo su ropa y calzado caro, se me ha venido a la mente la procedencia de esos bienes, y es que es de reconocerle a una persona trabajadora que se haya preparado bastante para tener las facilidades económicas que pueda llegar a poseer, ya que como lo he dicho antes, es justo, normal y necesario que alguien llegue a mejorar su estilo de vida y el de su familia mediante una riqueza que pueda haber obtenido fruto del trabajo, ¡O por qué no!, de haberse ganado la lotería, esto también sería totalmente valido y bien visto para cualquiera. Pero retomando lo que estaba diciendo sobre los semidioses terrestres, me hacen pensar sobre el origen de sus bienes, y quizá porque soy mal pensado, muchas veces termino haciéndome la idea de que mucho de lo que tienen es producto del lavado de dinero o robo a la cosa pública. ¿Usted alguna vez vio a Francisco Flores, paseando junto a su familia en el carro más impresionante que usted jamás hubiera soñado? Se imagina qué cruel sería que ese carro haya sido comprado con dinero mal habido, producto de donaciones cuando él era presidente. Las investigaciones determinarán lo que en verdad pasó, por el momento no creo que sea justo para nadie adelantar juicios valorativos. Pero solo le quiero dejar lo siguiente en la mente: la próxima vez que usted vea a un rico en la televisión, piense que esa limosina en la que anda, esa mansión en la que vive, ese viaje vacacional a Orlando que hizo recientemente, bien lo pudo haber hecho con dinero que le pertenece a usted, bien pudo haber sido con dinero con el que se iba a comprar una medicina que su hijo necesitaba pero no la tenían en el hospital, bien pudo haber sido con el dinero de la beca que le iban a dar a su hija pero al final no se la terminaron dando. No odie a los ricos, no lo haga con nadie, pero cuestione de dónde sacan sus ingresos porque al final posiblemente ese dinero sea suyo.