El Estado se esfuerza...

     ... Por caer mal.

     ARTICULO 1.- El Salvador reconoce a la persona humana como el origen y el fin de la actividad del Estado, que está organizado para la consecución de la justicia, de la seguridad jurídica y del bien común.

     En consecuencia , es obligación del Estado asegurar a los habitantes de la República, el goce de la libertad, la salud, la cultura, el bienestar económico y la justicia social.

     Esta semana, un grupo de personas salió a las calles a manifestarse en contra del pago obligatorio electrónico en los buses. La única manera que tiene mucha gente para ser escuchada es cerrar las calles, y eso hicieron. Los habitantes del Puerto de La Libertad, cerraron el camino al puerto y no permitieron que ningún vehículo pasara. ¿Qué hizo el Estado al respecto? Lo único que sabe hacer, mandar a la Unidad de Mantenimiento del Orden a que golpeara a toda esa gente para que despejen la calle.

     La empresa extranjera encargada de la expedición de las tarjetas con las que uno paga, se sentirá bien tranquila supongo, porque tienen frente a ellos a un Estado que obliga con violencia a las personas a que compren la tarjeta que esta vende. Ellos no necesitan invertir en más publicidad, porque si la gente no quiere pagar con esa tarjeta y protesta, simplemente ya saben que el Estado obligará a la gente a comprarla, porque Este prefiere tener contenta a una empresa extranjera que a su pueblo.

     Ya lo he dicho antes, similar pasa cuando los veteranos de guerra salen a protestar a las calles. A un grupo de campesinos ancianos que preferirían quedarse en sus ranchos trabajando, el Estado los tiene en el olvido y no les queda de otra que salir a cerrar calles. En su mayoría son ancianos que a la fuerza tuvieron que ir a pelear una guerra que al final solo les trajo beneficios a los comandantes guerrilleros y los que ya estaban en la opulencia antes, lo siguen estando después de la guerra. Eran hombres que los mandaban contra su voluntad a dispararse balas a los cerros con la incertidumbre de que quizá no iban a regresar vivos. Hoy salen ambos bandos a cerrar las calles para que sean escuchados, y el Estado solo atina en mandar a la Unidad de Mantenimiento del Orden, a dispersar sus protestas con golpes y quizá sacandoles algún ojo o intoxicandolos con gases.

     Pero eso no es todo, el Estado salvadoreño es cobarde. Cuando los motoristas de buses han salido a protestar a las calles, solo les mandan unos 3 policias para que los cuiden a ellos y que no les pase nada malo. ¿Así debería ser no?, pues en este caso no. Porque algunos motoristas, son bien violentos y si ven que un bus anda trabajando, empiezan a tirarles piedras, pincharles las llantas, amedentrar a los pasajeros para que se bajen; y los que no tenemos carro no nos queda de otra que aguantarnos hasta que decidan seguir trabajando porque ellos son los únicos que nos pueden llevar a nuestros lugares destino. La Unidad de Mantenimiento del Orden, les tiene miedo; tiene miedo levantarle la mano a un hombre jóven, fuerte y violento.

     La Unidad de Mantenimiento del Orden, no le tiene miedo a los ancianos famélicos, señoraras amas de casa y a la niñez. A ellos les mandan un bus lleno de sus mejores agentes de la UMO para que los saquen a palos y que no escatimen en usar su macana con toda la fuerza que les sea posible. Hace poco hubo un disturbio en un estadio, y todos los simpatizantes de un equipo se pusieron como locos a tirar piedras y quebrar vidrios de carros ¿saben qué hizo la UMO? Hacer un circulo y todos meterse dentro con los escudos al aire para que no les caiga ninguna piedra, y esperar a que eso pase. ¡Estado cobarde!.

     Estado ¿querés usar la violencia? Hacelo; ¿querés usar el dialogo? Hacelo; ¿Querés ignorar los hechos? Hacelo; pero hacelo parejo, que si te ponés a diferenciar quedás como un Estado cobarde.

     Que me habría gustado ver que cuando los pobladores del Puerto de La Libertad, estaban con el cierre de su calle, hubiera llegado un representante del Viceministerio de Transporte, a escuchar las demandas de todos los pobladores del lugar y a comprometerse que en el menor tiempo posible les iba a dar una solución viable, pero eso no pasó, pasó lo que ya les dije, el Estado mandó a la UMO a golpear a toda esa gente en defensa de la empresa extranjera encargada de administrar el pago electrónico.

     Me es grato saber que recientemente algunos diputados aprobaron una reforma al reglamento de transito para que la gente pague como quiera; es decir, efectivo o tarjeta. Ya no será obligación pagar solo con tarjeta electrónica. Que bueno, pero no hay que aplaudirles, porque en primer lugar ellos nunca debieron hacer obligación el pago electrónico y en segundo porque estamos en epoca electoral, y ahorita más que nunca los diputados si uno se los pide nos enseñan hasta las fotos de su bautizo con tal de quedar bien con la gente, porque a la mayoría de ellos en realidad no le importa lo que le pasa a uno.

     El Estado debe garantizar condiciones claras y justas de competitividad y desarrollo sostenido de las empresas privadas; eso debería ser así aca y en todas partes, pero nuestro gobierno del cambio sigue permitiendo barbaridades a la empresa privada y quiero señalar uno que debe ser de interes nacional: la recopilación de información personal. Una empresa como la de las tarjetas electrónicas de los buses, está recolectando información sobre nosotros, esta sabe a qué hora abordamos el bus todos los días, hacia dónde vamos, cuántos pasajes pagamos y a qué hora regresamos. Si usted va a un banco, en la entrada inmediatamente le preguntan qué tramite va a hacer para meter ese dato en una computadora y darle un número; así usted deja de ser un cliente y pasa a ser un número que hará una transacción, pero pasa que ahí hay empleados delincuentes y solo como ejemplo, ayer mataron a un empresario que salió del banco con más de $8.000. Al parecer los delincuentes ya sabían que había ido a retirar dinero y directamente se dirigen al empresario y no solo le quitan el dinero sino que también lo mataron. Alguien les avisó desde adentro del banco que acababa de salir con dinero, alguien a quién él le tuvo que haber dicho a qué iba porque le solicitó esa información.

     Pero bueno, ya alargué este breve artículo. Recuerde, el Estado debe trabajar para usted, no usted para el Estado. Ojo, que no es lo mismo comparandolo con lo que dijo J.F.K.: "No pienses lo que tu país puede hacer por tí, piensa en lo que tú puedes hacer por tu país". Porque país no es lo mismo que Estado, país somos todos, Estado son unos pocos.

     Nos vemos en una semana, escribiré algunos consejos para estar desconectados en estos días en los que literalmente internet es el aire que respiramos.