La risa no siempre es buena

     Saben, acabo de escuchar una grabación de un programa de radio y quiero escribir sobre una constante que he detectado en situaciones incomodas o comprometedoras para las personas cuando debaten. Pero primero quiero aclarar algo: nunca me gusta escribir sobre cosas que acabo de ver o escuchar porque entonces ya no soy imparcial. El 100% de contenido de este blog es escrito con ídeas en frío. Así bien, acabo de escuchar algo, que hace dos meses lo había deducido y hoy recordé que no había escrito sobre ello. Desde febrero no escribía nada, por eso ya no me acordaba de esto que, bueno, no que descubrí, pero sí que me di cuenta.

     "Las personas cuando se sienten incomodas en una conversación, debate o discusión; tienden a empezar a reírse por cada cosa de las que se les hace referencia"

     En base a observaciones previas había notado esto, pero hace dos meses en el programa de Debate con Nacho Castillo, invitaron a Paul Steiner de la sociedad civíl y a Rolando Mata del FMLN; en el marco de una agresión hecha por los activistas del partído político al ciudadano en cuestión. En todo momento que Paul Steiner describió los acontecimientos de la agresión, cuando las camaras enfocaban a Rolando Mata; este se reía todo el tiempo y enseñaba los dientes en una sonrisa burlona. Obviamente, este mecanismo de defensa se realiza involuntariamente en situaciones de estrés, como una manera de desprestigiar los argumentos de la parte acusadora cuando no se tiene mayor remedio que aceptar lo que te están diciendo.

Este tipo de sonrisa, se produce cuando se intentan
desprestigiar los argumentos de alguien. Tengalo en cuenta.

     Vamos al día de ahora. Recién escuché un debate entre el escritor argentino Agustín Laje con unas feministas. Cada vez que Laje, les decía un hecho que las dejaba mal paradas, inmediatamente se reían. Es por ello que me acordé que tenía que escribir sobre esto.

     Le doy un consejo. Cuando usted esté en una situación, quizá no incómoda, pero sí en la que las palabras que está escuchando son clave: quedese callado y enfoque su atención única y exclusivamente en su interlocutor. Esto hará que esta persona enfoque su punto de vista desde una manera más sincera y esto podría, de alguna manera, ayudarlo a usted a responder de adecuada manera. No se ría, si se ríe y su interlocutor conoce que se está riendo por estrés, usted estará en la palma de su mano y los resultados no serán los esperados.