Intento de homenaje a la selección de football playa

De como unos pescadores, derrotaron a unos gladiadores. 

¿Usted se considera pobre? la respuesta a esa pregunta dependerá de su concepto de pobreza. En lo personal económicamente yo me considero pobre, pero mentalmente no lo soy, soy rico. Para matizar esto cito a un profesor de economía que tuve en la universidad, el dijo: "la pobreza es un estado mental", y él tiene razón.

América Latina, puede salir adelante, y lo hará desde los pobres, de eso estoy convencido; ya ha pasado mucho tiempo desde que los ricos no logran sacarnos adelante. No me malinterprete, los pobres juntos a los ricos es la solución, no solo los ricos; lo natural tiende al equílibrio y es esa una solución.

En mi país, un grupo de pescadores de una isla, han quedado en cuarto lugar en el mundial de football playa, éllos son pobres. Sin embargo ese no es el logro más grande deportivamente hablando que ha conseguido mi país: Cristina Lopez quedó campeona en marcha en unos juegos panaméricanos, y Jorge Jiménez quedó campeón del mundo en tiro al arco; entre otros logros. Si bien yo no termino de asimilar el gran escandalo generado por ese cuarto lugar, reconozco que lo hecho fue grande, más de lo que muchos lograremos en la vida quizá.

Aca yo estoy acostumbrado a ver como los hijos de señores doctores y señoras abogadas obtienen becas de estudio en el exterior, jovenes que toda su vida contaron con los recursos necesarios para estudiar tranquilamente y también para recrearse sanamente, y sus padres también cuentan con los recursos económicos para pagarles el estudio en el exterior; pero en mi país esos jovenes son admirados que inclusive veo reportajes en las noticias sobre ellos, mientras que diario nacen muchos niños genios que por la pobreza jamás van a ni siquiera terminar el noveno grado.

Solo espero el día en que la gente pobre económicamente hablando, podamos ser tomados en cuenta en el desarrollo de nuestro país, pero como un derecho básico y sin necesidad de irse a partir el culo a tierras extranjeras en un evento que solo sirve de espectáculo para el ocio de un pueblo resignado a la marginación.