10.5.17

Menos del 0.63% de salvadoreños usa el SITRAMSS

El oficialismo maneja que la cantidad total de usuarios que usan el SITRAMSS es de 44000 personas. Dicha cifra, obviamente está elevada, a eso sumemosle que ese número tenemos que dividirlo a la mitad porque la misma persona que sale de Soyapango a las seis de la mañana, es la que va de regreso a las cinco de la tarde. Yo estimo que solamente son 19000 usuarios, pero tomemosle la palabra al gobierno: son 44000 usuarios los que se verán afectados con el uso ya no exclusivo del carril segregado.

Ahora, somos 7 millones de salvadoreños dentro del país. Hagamos la diferencia de 7000000 - 44000. Eso nos da 6956000, que son las personas que no usamos el SITRAMSS. Pasandolo a porcentaje, el 99.37% del pueblo salvadoreño no lo usamos, solo lo usa el 0.63% ya con todo y cifras infladas del gobierno. La democracia nos indica que la voluntad popular se expresa con el 50% más uno; entonces ¿por qué insisten en decir que el quitar la exclusividad al carril segregado al SITRAMSS afecta a la mayoría de la población? Si yo ya les demostré con números que ni el 1% de los salvadoreños lo usan.

En mi humilde y muy conservadora opinión personal, con todo respeto lo manifiesto, me importa un carajo que exista o no exista el SITRAMSS y no lo expresan de esa manera, pero el 99.37% de los salvadoreños comparten mi opinión o una muy similar.

Dicen que mañana, el Omar Angulo de los terengos; es decir, Walter Araujo, ha convocado a una manifestación pro izquierdista pro SITRAMSS. Me encantará ver el ridículo que hará, cuando los únicos que lo acompañen sean los nayibliever, pero bueno, creo que ya estoy desvariando un poco.

Conclusión: al 99.37% de los salvadoreños, el SITRAMSS nos importa un carajo. 

Fuera de tema: hoy iba a escribir sobre la situación en Venezuela, la cual es una clara maniobra de Estados Unidos para derrocar a Maduro. Hace falta ver afuera de foco para ver eso que es tan obvio; pero lo dejo para otro día, aunque ya sabe por donde va mi opinión.

El carruaje de los pobres, de acuerdo a la dirigencia terenga.