13.9.12

Hablemos bien de El Salvador

     Hola, ésta vez quiero escribir sobre la campaña publicitaria de el grupo Samix: "Hablemos bien de El Salvador". Como sabrán el grupo radial Saca Mixco, es propiedad de el ex-presidente de la Republica, Elias Antonio Saca, entre su programación ultimamente sale a menudo Tony Saca hablando, claro que él tiene toda la libertad de hacerlo, si son sus radios, pero lo que me llama la atención es un corto anuncio que a veces ponen en el que Tony Saca sale motivandonos a los salvadoreños a que hablemos bien de nuestro país. Ese anuncio definitivamente va orientado solo a un reducido segmento de la población, me refiero a una clase elitista, porque los demas lastimosamente no podemos hablar bien de El Salvador, lo curioso del caso es que por medio de la artimaña del populismo, con esa clase de publicidad se logra que los salvadoreños de "a pie" empezémos a engrandecer a El Salvador, cuando en la practica la verdad estámos lejos de hacerlo.

     A continuación plantearé 3 situaciones de salvadoreños: los que tienen dinero, los que creen que tienen dinero, y los que no tienen dinero; hay más clases, pero esas vienen al caso, ya que cada una podrá hablar diferente de El Salvador:

     Don Roberto José Apellido-Impronunciable: dueño de una cadena hotelera y empresario en otros rubros del turismo, es miembro activo de clubes sociales en los que semana a semana se reune con sus colegas a discutir sobre el rumbo que lleva el país. Por razones de negocios, él viaja constantemente al extranjero, tiene un condominio en Miami, en el que aprovecha a instalarse cuando viaja a Florida. Él siempre que se reune con sus amigos empresarios norteamericanos, les habla bien de El Salvador; les comenta lo barata que es la mano de obra y lo ingenua que es la mano de obra a la hora de reclamar por sus derechos. Además les comenta lo sencillo que es presionar al gobierno de turno para que interceda según sus interes económicos, ya que en nuestro país al tener un fuerte capital, se hace acreedor de poder político. También les comenta de los clubs sociales que tenémos, con canchas de golf y de tenis, además de como hay una reserva forestal llamada "El Espino", en la cual pueden fácilmente construir sus mansiones porque nadie se los impide. Y lo mejor de todo dice Don Roberto, es que a la clase baja, no se le es bienvenida en zonas privativas económicamente hablando, y que los mismos pobres policias prestan rapido sus servicios para amedentrar a los demás pobres que se les ocurre irse a meter a sus calles o parques. En fín, don Roberto recomienda venir a invertir a El Salvador, porque para el rico es muy fácil hablar bien de El Salvador.

     La señora Yajaira de Torres: Una morenita de pelo rubio, élla sabe que ese color de pelo le da status en El Salvador. Mientras camina por las calles de Metrocentro, con BlackBerry en mano, élla le comenta a su amiga Estefanía Perez, lo ultimo en chismes de la farandula mexicana, por lo general élla suele caminar en los pasillos de ese centro comercial, siempre que regresa de su trabajo hacia su casa en algún reparto escondido entre las calles de Soyapango. Siempre que llega a su casa se topa con la sorpresa que su refrigerador ésta casi vacío, solo hay tortillas duras y frijoles por lo que le toca que fiar en la tienda del pasaje, de todas formas lo que no come lo disfruta compensadolo viendo el Canal de las Estrellas, en su casa Claro. Su mamá se crió en un pueblito de el departamento de Morazán llamado Cacaopera, y cada vez que tiene la chance de ir a visitar a toda su familia ahí, se viste con short's y lentes obscuros para dar la sensación de ser el estereotipo de turista europeo en nuestros países. Les comenta como su hijo Melvin José ya puede usar el internet y que aca en San Salvador hay centros comerciales como en Los Angeles (según lo que a ella le han contado). Por lo general cuando ella hace esos viajes, nunca lleva mucho dinero (porque no tiene) y siempre termina siendo una carga, una carga que habla grandezas; después de todo a élla le han enseñado que puede hablar bien de El Salvador, al menos con la gente del campo.

     Don Carlos Valencia: limpiabotas del parque Bolivar en el centro de San Salvador. Él es una persona que se gana la vida de sol a sol en las calles y plazas de la capital, su promedio de ganacias netas es de 5 dolares al día trabajando 12 horas en condiciones primitivas. A él le toca enfrentar día a día el flagelo de la delincuencia, algunas veces lo asaltan y le quitan todo su dinero, a veces le llegan a pedir una "cora", la cual él con mucho dolor le da a los delincuentes, los cuales lo amenazan con matarlo. Él está casado, tiene 2 hijos, el mayor de 8 años que va a primer grado y la niña de 3 que nació con sordera en uno de sus oidos. Los niños no saben que es tener a su papá en la casa todo un día, los niños támpoco saben lo que es tener un juguete bonito, mucho menos entienden porque hay niños gordos que patalean cuando no les compran dos hamburguesas, no que solo una. Don Carlos está enfermo, pero el sabe que se enferman solo los ricos, él no tiene seguro social ni dinero para una clinica privada, él simplemente se acostumbra a el dolor. Algunas veces le llegan clientes que no sueltan su IPhone o su Galaxy, mientras él les da el servicio de limpiarles el calzado; algunos son tan descarados que le regatean el precio, el está seguro que cuando compraron sus telefónos no regatearon el precio, también sabe que hay servicios en los que hasta propina le dejan al empleado. Él no puede hablar bien de El Salvador, aúnque la radio le diga que lo haga, aúnque una voz conocida en la radio le diga por qué debe hacerlo, él ni sus hijos pueden hablar bien de El Salvador.

     Bueno, espero haberme dado a entender, éste era mi punto, hablar bien de El Salvador es algo utópico, ¿cómo esperan que hablemos bien de El Salvador si las personas que te piden que lo hagás son las mismas personas que han jodido tu país?. Es como que alguién después de haberte asaltado te diga con una sonrisa: "vamos hombre, pero poné una sonrisa que bien pude haberte matado", es exactamente igual. Hace unas semanas critiqué en éste blog, la campaña de Funes de "El Salvador avanza unido y en paz", hoy crítico la campaña de Saca de "Hablemos bien de El Salvador". Es increíble que habiendo grandes publicistas, contraten a esos mentirosos para que les creen un eslogan tan pedorro, es más, quizá es la misma persona la que pensó en esos dos esloganes, porque me cuesta creer que hayan dos personas tan imbéciles viviendo juntas en tan pocos kilómetros cuadrados. ¿De verdad nos vamos a creer lo que nos dicen en la radio y en la televisión?, ¿de verdad vamos a dejar que nos sigan mintiendo con sus frases tan pedorras?. Invito a las dos o tres personas que vayan a leer ésto que intenten activar ese sensor que todos tenémos en nuestra mente, ese sensor que activa la dignidad, y no hay que dejarnos engañar con tretas sucias de los políticos de nuestros días. 

Por hoy es todo, con ésto que finalicé espero continuar la próxima vez. Hasta pronto y gracias.